La primera reunión del Gobierno de Alemania tras la pausa de verano tenía previsto, entre otras cosas, poner en marcha una serie de medidas para ayudar a las empresas en un momento delicado de la economía. Después de entrar en recesión, la primera economía de Europa lucha por recuperar el impulso. Sin embargo, la cita del Ejecutivo de coalición ―formado por socialdemócratas, ecologistas y liberales― no llegó al acuerdo. Aunque el Ejecutivo sacó adelante una norma de apoyo a las start-ups (empresas de nueva creación con vínculos tecnológicos), no llegó al acuerdo para aprobar la Ley de Oportunidades de Crecimiento, una serie de rebajas fiscales para la industria que preveía desgravaciones en 2025, 2026 y 2027 por un monto de 7.560, 9.380 y 6.500 millones de euros, respectivamente, según un borrador de la norma al que ha tenido acceso Reuters.
La ministra de Familia, Tercera Edad y Juventud, Lisa Paus, de Los Verdes, se ha negado a apoyar la propuesta. El origen del desacuerdo es una dotación destinada a la infancia: en 2025 entrará en vigor la denominada Ayuda básica para la infancia, que busca agrupar servicios como las prestaciones por hijos. También trata de hacerlos más accesibles para aumentar los beneficiarios. El Ministerio de Familia estima en 12.000 millones de euros la inversión mínima necesaria. Sin embargo, desde Hacienda, comandado por el liberal Christian Lindner, se consideró suficiente aportar 2.000 millones de euros en 2025 para ese apoyo a la infancia y el mismo monto para los dos siguientes. Una cantidad inferior a la que el propio titular de Hacienda había mencionado hace unos meses, que cifraba la inversión entre 2.000 y 3.000 millones de euros.
“Es lamentable que hoy no haya sido posible una decisión del Gabinete, a pesar del acuerdo con el Ministerio de Economía”, ha dicho Lindner a la agencia DPA, en referencia al beneplácito que el ministro de Economía, Robert Habeck, ―también de Los Verdes― había dado a la norma. “Todo gasto social necesita una base económica sólida; las familias con niños también necesitan buenos trabajos”, ha defendido Lindner. “Las condiciones estructurales de la economía alemana deben mejorarse y las inversiones deben ser más atractivas. Alemania necesita crecer de nuevo”, ha proseguido.
La Ley de Oportunidades de Crecimiento, además de rebajas fiscales, incentivaba las inversiones respetuosas con el medio ambiente, especialmente con el clima, así como la investigación y facilitaba la amortización de algunos activos.
“Las disputas internas de Los Verdes están impidiendo los estímulos económicos esenciales que Alemania necesita con urgencia en la difícil situación actual”, ha declarado Bijan Djir-Sarai, secretario general de los liberales. “La señora Paus está jugando con los temas sociales en contra de nuestro poder económico. Esto es más que deshonesto y perjudica a nuestro país en su conjunto, tanto a las empresas como a las personas. Espero que esta actitud de bloqueo se abandone de inmediato y que la Ley de Oportunidades de Crecimiento finalmente pueda ayudar a mejorar la situación económica en Alemania”, ha agregado Djir-Sarai. A pesar del bloqueo de este miércoles, el proyecto defendido por los liberales se discutirá de nuevo a finales de agosto, en una reunión de la coalición que tendrá lugar en el castillo de Messeberg.
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